Ernesto Alterio: "Más que un viaje me parece una especie de sueño y así lo he enfocado"

Antena 3 estrena estrennó el pasado domingo 'La chica de ayer', adaptación del prestigioso, popular y premiado drama policial inglés de la BBC, 'Life on mars'. Ernesto Alterio dará vida durante ocho semanas al inspector Samuel Santos.

'La chica de ayer' es la historia de un policía de 2009 que "viaja" en el tiempo hasta 1977. El choque del personaje protagonista, Samuel Santos, con la España de la transición permitirá al espectador, desde el entretenimiento y el humor, descubrir cómo era la sociedad de la época. Es precisamente el actor Ernesto Alterio el que regresa a televisión para interpretar a este ambicioso y decidido policía.

Además, 'La chica de ayer' es la búsqueda por parte del protagonista, de sus raíces y de sus seres queridos; es la lucha de un hombre atrapado en el tiempo; y sobre todo, es la historia de amor de un hombre de 2009 y una mujer de 1977, dos personas totalmente distintas unidas por un accidente.

Conversamos con el actor Ernesto Alterio sobre su personaje en la serie y su experiencia en la grabación de 'La chica de ayer'. Samuel tiene 37 años en 2009 y tras un accidente "viaja" a 1977.

Samuel Santos es un policía inteligente y muy eficiente en su trabajo que un buen día "aterriza" en 1977.Cuéntanos, ¿cómo es tu personaje en la nueva serie de Antena 3?

Samuel es un personaje que tiene unos valores muy estrictos en lo que tiene que ver su profesión, valora mucho el lado humano de ser policía en cuanto a cómo tratar a la gente y el rigor. Es un tipo que valora mucho los derechos humanos de las personas, es muy comprometido. Su asignatura pendiente es el amor. A medida que va avanzando en su viaje en el tiempo, irá aprendiendo y se irá quitando capas con todos los choques que se va dando, las dificultades y todas las cosas que le van sucediendo. Vivirá una historia de cuento con Ana Valverde, el personaje que da vida Manuela Velasco.

Poco a poco se da cuenta de que ha realizado ese viaje por un motivo en concreto...

Poco a poco se da cuenta de que el viaje está relacionado con algo que tiene que aprender. Ha sido diseñado para que él se enfrente con todas sus dificultades. Es un viaje hecho a medida. Se enfrenta a toda una época, a toda una mentalidad, a una manera de hacer las cosas que no comparte, es más la rechaza totalmente. El gran aprendizaje pasa por desarrollar una capacidad de amar que la tenía completamente bloqueada.

Tus padres tendrán un papel muy importante...

Sí, porque Samuel también revisará su historia a través de ellos. Hay un punto en su vida que le marcó mucho, y poco a poco irá llegando a esa verdad e irá comprendiendo algo de sí mismo que le permitirá ser mucho más receptivo en el amor.

No ha tenido que ser nada fácil hacerse a este papel. ¿Cómo te has preparado?

Más que un viaje me parece una especie de sueño, así que lo enfoqué todo en cómo estar en una realidad desconocida. Descubrí una gente que son los onironautas, que son las personas que viajan en los sueños. He vivido a Samuel como si fuera un onironauta que puede operar dentro sus propios sueños, donde las reglas son desconocidas y tiene que adaptarse.

'La chica de ayer' es la adaptación española de la premiada 'Life on mars' de la BBC. ¿Visionaste la original antes de ponerte en la piel de Samuel?

Al principio vi algo de la serie, aunque lo cierto es que tampoco quise ver demasiado para no condicionarme y que la serie tuviera su propia forma de ser. Lo que vi fue el primer episodio para saber cómo era el tono, que queríamos conseguir y cómo se había conjugado todo, pero a partir de ahí no he visto nada más.

La primera temporada de ocho capítulos ya está rodada. ¿Qué tal ha sido la grabación de 'La chica de ayer'?

Ha sido bastante dura y muy intensa, la verdad es que no había respiro. He estado 24 horas inmerso en la serie, si no estaba grabando, estaba estudiando para el día siguiente, por eso ha sido muy intenso, pero también muy enriquecedor. Personalmente ha sido como una prueba máxima de la cual estoy satisfecho con el resultado. He aprendido un montón, siento que he avanzado muchísimo.

¿Y qué tal ha sido la relación o química con los compañeros de la serie?

Muy bien, he tenido muchísima suerte porque no hubiera sido posible todo este esfuerzo sin esos compañeros. Tanto los actores como todo el equipo de dirección me han asistido muchísimo y me lo han hecho todo más fácil dentro de lo complicado que ha sido. Con los actores, cada uno ha sido un viaje muy especial tanto en lo personal como en lo que estábamos construyendo. Estoy encantado, ha sido un viaje muy bonito.

¿Cómo ha sido el regreso a la pequeña pantalla?

La televisión es una gimnasia muy buena para los actores, porque tienes que resolver mucho y te genera muchos recursos interesantes para el trabajo.

Se te ve muy pocos en trabajos televisivos...

Anteriormente hice 'Vientos de agua' (Telecinco) que fue retirada y la pudo ver muy poca gente. Luego se pudo ver en otros circuitos. Lo cierto es que me gusta trabajar en otros terrenos y poder adaptarme a otras situaciones.

La serie retrocede hasta el año 1977. ¿Te gusta el look setentero que empapa toda la producción?

Me encanta toda la estética de los setenta. Me llama la atención y me divierten mucho las camisas abiertas de cuello pico, la chupa de cuero, los pantalones de campana... También me gustan mucho los coches, aunque a veces se echa de menos la dirección asistida (risas).

¿Te imaginas poder retroceder en el tiempo como le ocurre a Samuel? ¿Qué harías si algo parecido te sucediera?

Yo siempre he dicho que si viajara al pasado buscaría la forma de lucrarme con todo lo que se de la actualidad (risas). Creo que si viera a mis padres no lo soportaría y si me viera a mí mismo de pequeño me diría "tranquilo, que todo va a estar bien". La situación en la serie es muy rara porque ese niño que también soy yo convivió con un tipo que, sin saberlo, era el mismo de mayor. Esos momentos son muy locos porque son situaciones en las que los recuerdos y la realidad que yo estoy viviendo confluyen y, lógicamente, es muy duro.

¿Si pudieras elegir dónde te gustaría viajar en el tiempo?

Me gustaría ir a Grecia o a Roma porque está mucho más alejado en el tiempo que 1977, donde se ambienta 'La chica de ayer'. Si pudiera elegir me gustaría ver cómo era realmente esa época de la que tanta gente ha escrito pero que nadie ha vivido.

En Inglaterra el título original de la serie sale de una canción de David Bowie. ¿Qué título le hubieras puesto tú a esta adaptación de Ida y Vuelta?

Yo pondría un tema del grupo Triana. Hay una canción que dice: "la otra noche al lago fui, con la intención de conocer algo nuevo...".

En 'La chica de ayer' interpretas a Samuel, inspector de primera de la policía. ¿Qué tal ha sido la experiencia?

Ha sido divertido, me ha encantado interpretar a un policía. Impone interpretar a uno pero te dan ganas de "tirar de placa" en algún momento (risas). Disfruto haciendo este papel en ese sentido, pero en realidad me hubiera gustado interpretar a un policía un poco más estilo Gallardo (Antonio Garrido), que pasa de todo. En este caso me ha tocado hacer de poli bueno, pero me gustaría poder hacer de poli malo, me divierte mucho más.